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La vaca frita es una receta muy fácil de hacer, y como su nombre lo dice se hace con carne de vaca o ternera, con una buena combinación de diferentes especias, como por ejemplo el ajo y la cebolla le dan un sabor intenso y muy sabroso..
Para que la vaca frita quede perfecta y en su punto un secreto es cocinarla bien y con tiempo antes de deshilacharla por su propia hebra. Y a la hora de hacerlo debemos asegurarnos de que queden hebras bien finas, así podemos consumirla e ingerirla sin dificultad.
Para que su textura se vuelva crujiente es necesario sofreírlas junto al resto de los ingredientes en un sartén con un poco de aceite. El resultado es estupendo, lleno de sabor, característico de la cocina cubana. Como ves esta es una elaboración que puede hacer y disfrutar en poco tiempo.
INGREDIENTES:
- 800 gr de falda de res (ternera)
- 2 cebollas
- 1 pimiento verde
- Jugo de 1 lima o limón criollo
- 1 taza de caldo del cocido
- 4 dientes de ajo
- 3 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharadita de perejil picado
- 1 hoja de laurel
- 1 pizca de orégano
- 1 pizca de comino
- 1 pizca de pimienta negra
- Sal al gusto
ELABORACIÓN:
Lo primero que haremos es cortar finamente en juliana las cebollas y el pimiento, reservamos ambos para utilizarlos más adelante. Luego en una olla a fuego medio-alto cocemos la carne durante 45-50 minutos aproximadamente, le agregamos el orégano, comino, la hoja de laurel, una pizca de sal y un diente de ajo machacado. (Si utilizas una olla de presión se ablandará con mayor facilidad, en este caso solo cuécela durante 20-25 minutos)
Cuando la carne esté cocida, la retiramos del fuego escurrimos y dejamos enfriar a temperatura ambiente. Una vez que haya enfriado un poco y no corramos riesgo de quemarnos las manos, con la ayuda de un tenedor la deshilachamos deshaciéndonos del pellejo y los ligamentos que pueda tener.
A continuación, en una sartén calentamos el aceite de oliva a fuego medio, añadimos el resto del ajo machacado, el pimiento y la cebolla ya cortados. Sofreímos por 2 minutos e incorporamos toda la carne.
Sofreímos hasta que la carne se torne con un aspecto dorado crujiente para luego añadir el zumo de limón y pimienta. Rectificamos que el punto de sal sea el adecuado y agregamos otra pizca de ser necesario, cocinamos por un minuto más y por último agregamos el perejil picado.
Retiramos del fuego y servimos caliente preferentemente con arroz blanco, frijoles negros y plátano maduro frito.
